martes, 7 de febrero de 2012

Lo mejor de la Fashion Week danesa O/I 2012



Si antes coincidíamos con Londres, ahora nuestra rival directa es la ciudad de La Sirenita; antes nos llamábamos Cibeles y ahora, patrocinio mediante, nos conocen como Mercedes Benz Fashion Week Madrid: salimos ganando, por ambas partes. La de Copenhague es una cita de menor perfil, pero también lo somos nosotros y buscamos la mayor atención posible: nuestros compañeros daneses se merecen lo mismo.


Los más aclamados por parte de los profesionales especializados durante la reciente Semana de la Moda de Copenhague han sido las firmas Gaia, Henrik Vibskov y Soulland. ¿Os apetece conocer un poco más en qué direcciones apunta la moda que llega del frío?




En todas las industrias, especialmente las que se dirigen a los mass media, nos gusta crear al menos una figura local que por controvertida o simpática sume popularidad y se convierta en estandarte tanto dentro de las fronteras del país como fuera. Algo como nuestro Davidelfín es Henrik Vibskov, casi una superestrella en Dinamarca.

Su última colección está inspirada en los instrumentos musicales y cuenta con estampados psicodélicos, toques de color y tejidos tecnológicos que nos sitúan en un futurismo cálido. Todos los modelos usaron gorra con print de cuerdas como complemento en la pasarela.

 

La comunicación pasado-futuro vino de la mano de Asger Juel Larsen, exclusivamente centrado en el diseño masculino. Su colección recoge ideas románticas e históricas como por ejemplo de la Rusia zarina para situarlas en un escenario moderno de estética algo agresiva, a veces ninja y otras muy glam.

La incorporación de las pieles se nos antoja como muy apetecible en un país como Dinamarca, y algunos cortes y colores son interesantes. El traslado de la propuesta de la pasarela a la calle es más fácil de lo que parece por la puesta en escena.

 


Mucho más clásicos son los responsables de Velour, una joven marca nacida en 2005. Sobriedad en forma y fondo para quienes no estén dispuestos a ir más allá del traje de pantalón con jersey de lana. Contiene cierto aire de escuela americana y exaltación de la contención, de la vida sana y puritana (que luego acaba en tragedia).

 

Por último, Soulland es un gran referente danés en la moda masculina, una casa muy bien posicionada en el mercado. Su seña de identidad se basa en el respeto al diseño tradicional escandinavo, que puede gustar más o menos, pero siempre viene apoyado en la calidad. Dosis justas de originalidad, tejidos fríos y cálidos, algún print con color y contención urbana tan danesa como el propio Tívoli.